Es normal que te hayas preguntado esto más de alguna vez… Y es que durante nuestro desarrollo presentamos varios patrones durante el ciclo menstrual, lo cual quiere decir que, en condiciones normales, somos regulares cuando nuestro periodo llega cada 28 días y otras irregulares, como aquellas a quienes el periodo les dura casi 8 días y tienen intervalos entre los 21 y los 35 días.

Para empezar, te contaremos que los métodos de planificación son aquellas alternativas que buscan prevenir un embarazo no deseado, lo cual facilita a quienes comparten intimidad sexual disfrutarla en forma libre y responsable.


Entre los métodos más populares podemos mencionar los siguientes y qué efecto podrían tener sobre nuestro periodo:


El Sistema Intrauterino (SIU): Consiste en un pequeño sistema hecho de plástico en forma de T, el cual libera una dosis de hormona, el cual se introduce en el útero.

Este hace que la cantidad de sangrado sea menor y ayuda a disminuir las molestias de los cólicos menstruales.


La “T” de Cobre (DIU): Es uno de los más utilizados y consiste en la liberación de iones de cobre en el útero, lo cual impide la fecundación.

Con su uso aumentan las probabilidades de que el flujo de sangre y la duración del ciclo sea prolongada y abundante, además de que los cólicos no pierden fuerza.


Implante: Este es conocido como los pequeños cilindros que van implantados debajo de la piel del brazo y es uno de los preferidos por las mujeres dentro de su planificación.

Su uso puede causar que el ciclo menstrual se vea afectado con un sangrado irregular y sin reducir los cólicos.


La píldora: Si se toma diariamente a la misma hora, su uso permite la regulación del ciclo menstrual y reducir totalmente el sangrado, además de los cólicos y, como plus, controlar la aparición del acné.

Con ese método, más allá de las complicaciones que pueden generar en el organismo, estas inician cuando no se sigue la exactitud en la toma de la píldora, lo cual puede afectar su efectividad en la prevención de los embarazos no deseados.


Lo importante en este tema es que sepas que cada organismo es diferente y los métodos de planificación no actúan de la misma forma en las mujeres, por lo que es muy importante que, antes de comenzar a utilizarlos, consultes con tu ginecólogo para saber cuál es el mejor para ti.